El caprilismo

El mito del «precio internacional»: ¿cuánto se paga por un litro de gasolina?



En Venezuela se habla mucho de que la gasolina se tiene que vender «a precios internacionales», queriendo decir que hay que cambiar el subsidio prácticamente total que se ha mantenido durante los últimos años en el precio final del combustible, para establecer una tarifa que le dé sustentabilidad al proceso de producción y suministro. Con la crisis actual, provocada principalmente por el bloqueo impuesto por Estados Unidos a nuestro país y a Pdvsa en particular, se ha intensificado el tema de la necesidad de aumentar el precio de la gasolina, pues nuestra empresa petrolera ahora menos que nunca está en condiciones de mantener un servicio sin retorno de inversión.

Aunque la lógica dice que habría que empezar por definir la estructura de costos de producción de la gasolina nacional, para luego asignarle un margen de ganancia que resulte útil, hay gente que alegremente sigue opinando en diversos foros que, directamente, «hay que poner la gasolina a precios internacionales».

Pero el manido lugar común, cuando se piensa detenidamente, resulta problemático. ¿Cuál es el fulano «precio internacional» de la gasolina? O, si son varios, ¿cuál es el que se debería implementar en Venezuela? Y ¿por qué?

Lo primero que hay que decir es algo que puede no resultar tan obvio para muchas personas como debería: no existe algo así como un «precio internacional» de la gasolina. A diferencia del oro, por ejemplo, del que se puede conocer su valorización precisa, o del petróleo, que cuenta con varios marcadores de acuerdo a los mercados, en el caso de la gasolina el precio es independiente en cada país. Incluso puede variar dentro de un mismo país, como por ejemplo en Estados Unidos, donde podemos encontrar precios del combustible distintos según el estado o, incluso, según la estación de servicio.

Por eso decidimos hacer una revisión de los precios de la gasolina en países de todo el mundo para compararlos y tener una visión más concreta de lo que pagan por combustible las personas que no viven en Venezuela.

En el siguiente gráfico podemos ver el precio de la gasolina en una lista de 63 países seleccionados. Trabajamos con naciones de todo el globo escogidos de manera referencial. Los valores están expresados en dólares estadounidenses por 1 litro de gasolina. Es importante recordar que en muchos casos se trata de valores promedio, ya que los precios reales pueden tener variaciones en cada caso. Al deslazarse sobre las barras del gráfico aparecerá el nombre del país y el precio de la gasolina correspondiente al mismo.



Observamos que hay una gran variedad de precios. Tenemos un máximo de $2,15 en Hong Kong y un mínimo de $0,09 en Irán. La diferencia es exorbitante. Llenar un tanque de 40 litros cuesta en Hong Kong 86 dólares, mientras en Irán el mismo vehículo se abastecería con 3,6 dólares.

Entre esos dos puntos hay un inmenso rango de opciones. El promedio general es de $0,90. Tal vez ese mitológico «precio internacional» se puede parecer a esta cifra. Sin embargo, en las particularidades las variaciones son importantes. Por eso refinamos la selección para poder observar los precios por regiones. Recordemos que no se incluye la totalidad de los países de cada región sino únicamente los que, perteneciendo a cada una de ellas, forman parte de nuestra lista inicial.

Europa y Norteamérica

En primer lugar, veamos los precios del combustible en los principales países europeos, Estados Unidos, Canadá y Rusia.



En este grupo, tenemos un precio máximo de $1,61 por litro de gasolina en Países Bajos y un mínimo de $0,59 en Estados Unidos.  Hay que recordar aquí que la nación norteamericana es, hoy por hoy, uno de los principales países productores y exportadores de crudo, mientras que el país centroeuropeo tiene una producción propia bastante baja.

En este gráfico llama la atención que las barras se mantienen bastante similares en el caso de los países europeos. En los casos externos, es decir, EEUU, Canadá y Rusia, el precio es menor, probablemente por tratarse de países con producción importante de crudo. Mientras el precio de la gasolina en Estados Unidos es el que ya señalamos arriba, el de Rusia es de $0,63 y el de Canadá es $0,77. Esto hace que el promedio general de esta selección sea $1,29, mientras si consideramos solo los países europeos el promedio aumenta a $1,38.

Destacamos el caso de España, país referencia cultural y política para nosotros, donde el precio de la gasolina es de $1,18. Esto significa que un tanque de 40 litros cuesta 47,2 dólares y uno de 60 litros cuesta $70,8.

Asia

Consideramos un grupo de los principales países asiáticos para saber cuándo paga la gente por el combustible en esa región. Los resultados los podemos ver en el gráfico siguiente:



El promedio en los países asiáticos es de $1,03 por litro de gasolina. Observamos el valor máximo en Hong Kong, con una tarifa de $2,15 y el mínimo en Malasia, con una tarifa de $0,3. En esta muestra hay bastante diversidad. Los precios más baratos después de Malasia corresponden a Vietnam, con $0,54, y China, con $0,83. En el otro extremo, la segunda tarifa más cara está en Singapur, donde el litro de gasolina cuesta $1,33.

África

En los países africanos podemos encontrar también precios diversos.



La gasolina africana más cara es la del Congo, y cuesta $1,17. La más barata está en Angola, país productor de petróleo, con una tarifa de $0,28 por litro. Entre estos dos extremos, el promedio se ubica en $0,63.

Medio Oriente

El caso del Medio Oriente muestra bastante diversidad. Veamos:



Irán, uno de los principales países petroleros y miembro de la OPEP, tiene el precio más barato de la gasolina, no solo en la región sino a escala global. Allí el combustible se paga a $0,09. En segundo lugar está Arabia Saudita, país con la mayor producción de crudo del mundo, que cobra $0,22 por litro. En Israel el combustible es bastante más costoso, pagándose a $1,42 por litro. El promedio regional se ubican en $0,60.

América Latina

Veamos ahora la situación en los países que rodean a Venezuela. En nuestro patio el panorama no es menos diverso que en otras regiones.



En el extremo superior tenemos una tarifa de $1,45 por litro en Belice, seguido por Uruguay con $1,25 y Cuba con $1,2. Y en el inferior encontramos a Ecuador, donde la gasolina cuesta $0,49 el litro, seguido por Panamá con una tarifa de $0,51.

En países como Colombia, Bolivia y El Salvador se paga por litro de combustible precios que rondan el medio dólar, mientras naciones como Costa Rica, Chile, Perú y Paraguay la tarifa se acerca a una unidad de la moneda estadounidense.

El promedio regional es $0,91 por litro de gasolina, muy similar al promedio mundial.

Los países OPEP

Ahora veamos una comparación que nos puede orientar también hacia nuestro caso particular: las naciones que, como Venezuela, pertenecen a la Organización de Países Exportadores de Petróleo. Esto porque, si bien Venezuela puede compararse con sus vecinos regionales o con países que en otras latitudes compartan características similares (población, PIB, etc.), una de las particularidades de nuestro caso es que somos un país petrolero. En este sentido, vale hacer el ejercicio de observar específicamente en cuánto se paga la gasolina en estos países.



En este grupo encontraremos algo así como «una mezcla de África y Medio Oriente». Más específicamente, los precios más caros de África y los más baratos de Medio Oriente. Congo y Gabón tienen las gasolinas más caras, mientras las de Irán y Arabia Saudita destacan como las más baratas. En el medio están Irak y Emiratos Árabes Unidos, cuyas tarifas oscilan alrededor del medio dólar estadounidense.

Es una muestra de que, aún entre los productores de crudo, la diversidad en las tarifas está a la orden del día. Por esta razón el promedio de los países productores se ubica en $0,53 por litro, muy similar al precio actual de un país como Estados Unidos.

La intención de este trabajo es que el lector pueda visualizar los datos, hacer comparaciones y sacar sus propias conclusiones. Con esta muestra solo buscamos señalar que el mito de los así llamados «precio internacionales» no arroja respuestas claras en cuanto a cuál sería una tarifa ideal para la gasolina venezolana.

También es preciso reiterar que cualquier precio que, eventualmente, se fije en nuestro país deberá principalmente responder a los costos de producción de la gasolina. Para esto habrá que tomar en cuenta las dificultades que actualmente enfrenta nuestro país producto de las medidas coercitivas impuestas por Estados Unidos, que pesan fuertemente sobre nuestra industria petrolera, haciendo que la capacidad de producción y refinación se haya visto lamentablemente comprometida. Por eso, si bien es justo que al ser un país petrolero, y siendo nuestro petróleo un bien público, podamos tener el privilegio de disfrutar una gasolina barata, también es justo comprender que en nuestro contexto actual el combustible debería ser sostenible para poder garantizar el suministro.

Tal vez esta revisión, que incluye países con diferentes condiciones económicas, sociales y políticas, pueda servir para hacernos una idea más concreta acerca de a cuál de los «precios internacionales» se debería parecer más la tarifa que finalmente comencemos a pagar por nuestra gasolina.



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