El acuerdo imposible

Venezuela parece la capital de un galeánico "mundo al revés". Se supone que lo normal es que grupos en conflicto con un Gobierno busquen que este se siente a negociar con ellos. Quien está en el poder, en principio, no hará concesiones a quien pretende defenestrarlo; son los contrarios quienes persiguen lograr que el Gobierno ceda.

Pues aquí no. Aquí el Gobierno hace llamados al diálogo político para resolver la situación del país y la oposición insiste en negar el acuerdo y mantiene un discurso soberbio e irresponsable que no ha hecho sino acentuar el sufrimiento de los venezolanos.

¿Por qué la oposición no actúa políticamente y "aprovecha" la crisis para ganar posición en el juego democrático? La semana pasada el presidente Maduro volvió a llamar a un acuerdo nacional para afrontar la difícil situación de la pandemia, lo que sería el espacio ideal para avanzar en lo político. Pues no, el líder de la oposición, Guaidó, dijo que no, que solo acordaría la salida de Maduro del poder. Esto fue solo dos días antes de que se frustrara una invasión paramilitar marítima en la costa de La Guaira. Es decir, aún teniendo al Gobierno en situación difícil y queriendo negociar, ellos prefieren que el país se siga hundiendo y apuestan por las absurdas opciones violentas.
Son irresponsables, pues deberían saber que no lograrán vencer al Gobierno por la fuerza. Se creen merecedores naturales del poder, por eso se niegan a negociar o a ganarlo políticamente. El tamaño de su soberbia solo se compara con el de su estupidez política.

En la oposición hay factores que, aún cuando comparten su aversión por el chavismo, se diferencian en el hecho de que parecen entender que la opción política es más cercana y real que la violenta. Y no hablo de la "oposición Claudio Fermín", basta con ver las opiniones de Ramón Aveledo, Chúo Torrealba, el presidente de Fedecámaras o el mismo Henrique Capriles para saber que hay posibilidades. A esa gente lo que le falta es el valor de dar un paso adelante asumir el liderazgo político de la oposición, dejar atrás la locura y avanzar en un acuerdo con el Gobierno.

A estas alturas no creo que sea imposible comprender que aquí no habrá solución económica ni recomposición social posible si no se destranca el juego político. Un acuerdo solo requiere cordura y no mucho más.

@ÁngelDanielCCS